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El pueblo de Los Pitufos es real.

No es una historia fantástica ni un cuento para los más pequeños de la casa, se trata de una realidad que permitió transformar en sólo 24 meses la economía de una de las localidades con menos habitantes de toda Andalucía.
En el pueblo malagueño de Júzcar se produjo el estreno mundial de la película Los Pitufos. Este fue elegido por Sony para rodar la película de animación de los Pitufos. Por ello, tuvo que pintarse por completo de color azul.



La multinacional Sony Pictures Releasing pinto el municipio de Júzcar, en MálagaEspaña debido al lanzamiento mundial de una película sobre los Pitufos.

Los míticos Pitufos vivieron sus peripecias nada más y nada menos que en este pueblecito español de la Serranía de Ronda, que no supera los 250 habitantes. En los primeros fotogramas de la película, la torre Eiffel también es azul y las pirámides de Egipto y otros lugares emblemáticos, también lo son. Es cosa de la magia del cine. Pero más allá de alterar digitalmente el color de algunos lugares emblemáticos, la productora decidió que el pueblo Pitufo tenía que existir de verdad.

Tras una intensa búsqueda por el mundo para encontrar esa ciudad de ensueño, dieron con el lugar perfecto, Júzcar. Algunos de los requisitos por los que escogieron este lugar son la climatología o su buena ubicación. Lo más curioso no es que únicamente usaron el pueblo para el rodaje, sino que decidieron pintar de azul absolutamente todas las casas y edificios de la localidad. Hasta el cementerio del pueblo y la iglesia, han tenido que cambiar sus colores originales para sumarse al “ambiente Pitufo”.
Antes de realizar los cambios se tuvo que realizar una asamblea popular para explicarles el proyecto a los vecinos y ver si querían o no aceptar la propuesta de la Productora. El pueblo de Júzcar aceptó la iniciativa con los brazos abiertos y se mostraron muy contentos con la idea.

Esto ayudo al pueblo económicamente, los hoteles tienen más reservas y en la generación de empleo, la iniciativa fue realmente favorecedora para la localidad.
Si deseas visitar este maravilloso pueblo azul, debes probar sus platos típicos como las migas, la olla, el guiso de ajos porros, el sopeao y por supuesto, acompañado de un buen vino hecho en el municipio.